Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), iniciativa impulsada por las Naciones Unidas para el desarrollo sostenible, contemplan la necesidad de llevar a cabo acciones para erradicar la pobreza, proteger el planeta y asegurar la prosperidad para todos y todas. Cada uno de los 17 objetivos tiene metas específicas, pero el nexo común es la voluntad de llevar a cabo un desarrollo sostenible tanto a nivel medioambiental, como económico y social. Una gestión del espacio de trabajo (IWMS) realizada por el Facility Manager nos ayuda a impulsar la sostenibilidad de los edificios y a contribuir en el cumplimiento de los ODS.
Una gestión eficiente de los activos inmobiliarios nos permite aportar al cumplimiento de los objetivos para la Agenda 2030. Específicamente, lograremos trabajar entorno a los siguientes objetivos: 6. Agua limpia y saneamiento, el 7. Energía asequible y no contaminante, 8. Trabajo decente y crecimiento económico, 9. Industria, innovación e infraestructura, 11. Ciudades y comunidades sostenibles, 12. Producción y consumo responsables, 13. Acción por el clima y el 17. Alianza para lograr los objetivos.
Construcciones adaptadas al entorno
Los primeros propósitos que nos acercan a gestionar edificios más sostenibles se centran en reducir la climatización y el agua corriente sanitaria. ¿Cómo podemos lograrlo? Reduciendo el consumo de energía en los edificios y consiguiendo que el uso indispensable provenga de fuentes de energías renovables.
Por ejemplo, aprovechando más el diseño arquitectónico inteligente y las condiciones del entorno. Para ello, es necesario un estudio exhaustivo del espacio donde se va a construir (o ya se ha construido). La climatología del lugar es fundamental, no solo por la luz, sino también por otros factores climatológicos como la cercanía a la costa o el viento.
El potencial de los edificios ante el cambio climático
Existen estrategias de mitigación al cambio climático en edificios que se centran en promover el ahorro energético, el uso de energías renovables, el manejo adecuado de residuos, la integración de vegetación en los proyectos (techos, paredes y terrazas verdes). También es posible la incorporación de elementos que faciliten el uso de transporte no motorizado (como la instalación de estacionamiento para bicicletas o de estaciones de carga para vehículos eléctricos), entre otros.
Estas son tan solo algunas de las ideas que se pueden llevar a cabo tanto en edificios de nueva construcción como en rehabilitaciones o en edificios finalizados.
La gestión de los activos inmobiliarios y específicamente de los entornos de trabajo mediante herramientas software como puede ser IBM TRIRIGA permiten al Facility Manager llevar a cabo un trabajo más acurado y, por tanto, más eficaz.
Entre los ejes de la gestión patrimonial de inmuebles, destaca la eficiencia energética y operativa y la optimización de recursos. Es de gran relevancia tener en cuenta esta oportunidad dado que nos permitirá crear espacios de trabajo más sostenibles y beneficiaremos tanto al medioambiente como a las personas que forman parte de la organización y a la sociedad en general. La Responsabilidad Social Corporativa (RSC) de las empresas muestra la cultura, la misión y los valores de la organización.
Si desea obtener más información sobre el sistema de gestión de activos inmobiliarios IWMS, no dude en ponerse en contacto con nosotros.
Desde CT ACTIVA, le ayudaremos en todo el proceso de implantación del software IBM TRIRIGA, además también durante el crecimiento y la maduración. Le acompañaremos en todo momento.